En ciertas ocaciones, de la nada, te vienen a la mente recuerdos del pasado.
Momentos que en ese entonces
no fueron simpáticos ni significativos.
Ni siquiera entendes cómo es que te acordas de un detalle tan insignificante
después de tanto tiempo
Al parecer, con el correr de los años,
algunos de esos momentos se hacen más simpáticos y ahí es cuando valoras el buen momento que fue y lo feliz que fuiste en ese pequeño y diminuto instante, donde dos almas se encontraban y festejaban lo agradable que se sentía ese encuentro.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario