Removedores de conciencias....

Hoy me dispuse a echar un vistazo a mi blog para leer las actualizaciones de mis amigos, ver si Vane RV escribio un nuevo post o algo así... efectivamente Vane AL FIN escribió algo nuevo lo que me puso alegre ya que ella nunca escribe algo aburrido. Visitándola, vi que puso un "Manifiesto del Blogguero", lo que sería más o menos las reglas que sigue alguien que tiene blog... posterior a eso vi que puso unos links donde también entré a leer. Me encontré con palabras que me sorprendieron. Un periodista de ABC escribió en su BLOG que está en contra de la gente que escribe en sus blogs personales sin ser periodistas. Aparentemente, está celoso porque gente que no es periodista escribe mejor que él y se publica en la WEB. Luego de leer eso vi que MI IDOLA PERSONAL MABEL RENHFELD le contestó ese post en su blog de abc también. Ella luego es lo más! Todo eso me dio pie a que vuelva a escribir porque como todos saben, he cesado de escribir ya hace un tiempo. Es que escribir es algo que te nace, no hay que hacerlo por obligación.

Bueno, yendo al punto, luego de haber leído  los 4 links que hablaban sobre los blogs, las censuras, la libre expresión, el periodismo, etc., no quiero dar mi opinion para crear polémica otra vez y bla bla, simplemente quiero anexar esto que escribí para la facu el año pasado tras una presentación y entrevista que se realizó en clase.

Removedor de conciencias
Por: Fátima Barúa.

Antonio Pecci, periodista destacado del diario Ultima Hora, brindó una entrevista en la Facultad de Filosofía UNA el lunes pasado, frente a alumnos de la carrera de Ciencias de la Comunicación en la que manifestó su preocupación por la falta de originalidad del periodismo nacional actual. No obstante, dio esperanza a los jóvenes que siguen creyendo en un Paraguay mejor.

Los futuros comunicadores quedaron asombrados con las palabras de Antonio Pecci, quien con ánimos y ganas defendió su postura de seguir creyendo que el periodismo puede cambiar la mentalidad de los paraguayos. “Incitar al cambio, despertar conciencias”, expresó refiriéndose a la misión de todo periodista de verdad. Dentro de una sociedad donde se está perdiendo el hábito de leer, dijo que la lectura es indispensable dentro del campo periodístico.

Asimismo, recalcó la importancia de saber escribir, y que eso sólo se da con la práctica de leer muchos libros. En ese aspecto se refirió como un gran ejemplo a Josefina Plá: “la calidad de su prosa”, indicó y motivó a los estudiantes a leer las obras de la misma. No pudo dejar de nombrar a otros grandes como Alcibiades González del Valle y nuestro querido ex profesor Helio Vera, que nos legó muchos libros excelentes y siempre en sus clases incitaba a la lectura. Manifestó que en la actualidad lo que se está perdiendo es la esencia del periodista, el estilo propio, eso que hace que se distingan unos de otros, no importa el campo donde se centren. En este aspecto dio nombres como Gabriel Cazenave que creó un monólogo el cual todos recuerdan “Como te va Gabriel”, lo que hizo con gran creatividad y fue algo que lo marco y distinguió entre los demás. Incitó a que todos los periodistas consigan ese estilo propio, no copien ni intenten parecer a otros, que sean auténticos.

Pecci recalcó que el objetivo de un periodista debe ser el de impulsar un pensamiento crítico en las personas, estimular al cambio. Un periodista debe escribir de tal forma que le llegue el mensaje a los lectores y éstos no solo se queden pensando en lo que leyeron, sino que les mueva a actuar. Cuando los jóvenes le preguntaron su opinión personal sobre Augusto Roa Bastos, de quien año atrás publicó un libro, dijo que Roa Bastos “no se tragó el cuento del éxito”, no dejó que la fama ni el prestigio que ganó por la obtención de reconocimientos internacionales hagan cambiar su personalidad ni su esencia.

En una entrevista amena, como si estuviese dando una clase, el periodista Antonio Pecci hizo que muchos de los estudiantes se den cuenta de lo importante que es el papel del periodista e hizo que no se olviden de algunos detalles para ser profesionales de verdad y no simples mediocres universitarios que abundan hoy en día en el país.